Aquí decidimos pegarnos el lujo padre para descansar y cogimos un hotel a las afueras de la ciudad en una antigua Villa romana reformada. Todo precioso, con playa privada y unas vistas impresionantes de la ciudad y de las islas. Sin embargo la ciudad.... .... no podemos negar que es preciosa, pero.... nos pareció demasiado enfocada al turismo, la calle principal son todo tiendas de recuerdos y restaurantes. Eso si, bonita es un rato.
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