jueves, 24 de septiembre de 2015

El Algarve

Esta vez dejamos unos días de vacaciones para finales de septiembre. No nos apetecía hacer un vuelo largo, porque solo disponíamos de menos de unos días. Pero queríamos descubrir un lugar distinto, no los típicos destinos playeros. Había oído hablar muy bien del Algarve, pero fue un post de un blog que encontramos de casualidad el que nos llevó a las islas de la ría de Formosa. Sólo podemos decir que literalmente parecía que estuviésemos en alguna isla perdida del Caribe.

Nos alojamos en Olhão, un pueblo marinero en la costa del Algarve. El pueblo tiene algunas casas con fachadas de aire colonial, y pequeñas callejuelas con encanto en el barrio de los Pescadores. Hay multitud de restaurantes que se llenan de turistas ingleses por la tarde. Al lado del puerto, se encuentran los 2 edificios del mercado, que centran gran parte de la vida social de la zona. Encuentras pescadores a cualquier hora del día tomando algo en las terrazas, com si se hubiese parado el tiempo. No es un pueblo de esos que te llama la atención por ser precioso, pero tiene buenos alojamientos para desplazarte desde allí a otros destinos del Algarve, y parten ferris hacia todas las islas de la ría de Formosa. Además, hay que reconocer que las puestas de sol desde el puerto son fabulosas.




La primera isla que visitamos fue Armona. Cuando te bajas del barco, parece que te has metido en algún túnel del tiempo y has cambiado de dimensión. Pequeñas parcelitas con casas construidas en la arena, comunicadas por una única calle de cemento que acaba en un paseo infinito de tablas que desemboca en la playa. Sin coches, sin ruido, sin prisas...
Y cuando llegas a la playa... espectacular!!! Playas infinitas de arena blanca, con muy pocos turistas y agua turquesa.








Al día siguiente nos fuimos a la isla de Culatra, también en la ría de Formosa. El viaje en ferry es un poco más largo, pero no se te hace para nada pesado. Al entrar en la isla, están concentrados los restaurantes y tiendas del lugar. Comimos en uno de ellos un marisco estupendo. De nuevo, volvimos a sumergirnos en esta especie de Caribe portugués, con casitas en parcelas de arena, como si el tiempo se hubiese parado en la isla. Las playas de Culatra resultan igual de espectaculares que las de Armona. ¡Ojo! Si eres de los que no les gusta el viento estás perdido, porque atiza que no veas aunque no haya frío. Aun así, nos encantó meternos con las peques en esas aguas limpias del Atlántico que tanto nos gusta. 

Por la tarde, regresamos en el ferry a Olhão y caminamos por el paseo marítimo.
Nosotros no tuvimos problemas con los mosquitos en las islas, pero también es verdad que antes de ir, por si las moscas, nos hicimos con repelente de mosquitos para no acabar acribillados.
Dejamos para otro viaje visitar el resto del Algarve con tranquilidad, pero es verdad que esa zona de Portugal tiene un algo especial que no se parece a lo que ya conocíamos.








lunes, 20 de julio de 2015

Festival Pirineos Sur

Hola!

Este ha sido nuestro primer viaje de los 4 juntos. Nos daba un poco de respeto las horas de coche, ya que no sólo suponía el primer viaje un poco largo en coche de Iris, sino que encima ha sido el primer viaje de Alma sin pañales, pero... ¡prueba superada!

Nos hemos ido a Panticosa, ya que en el pueblo de al lado (Sallent de Gállego) se celebra el Festival de Música "Pirineos Sur" Ha sido un viaje bastante divertido. por las mañanas rutillas fáciles por la montaña, y por la tarde / noche a Sallent a disfrutar de los conciertos y actividades gratuitos en el pueblo, y una de las noches visita al embalse de Lanuza a ver el concierto de Ara Malikian, Noa y Mira Akward. Espectacular el paisaje y el escenario flotante La única pega es que no nos pudimos quedar hasta el final, ya que empezó a llover un poco y nos dio miedo que las niñas se enfriasen.

El mercadillo del pueblo de Sallent es muy variado y divertido, todo con un ambientazo impresionante, y los conciertos abiertos una gran idea, pero lo mejor si viajáis con niños son los columpios al lado del rio al lado de todas las actividades del festival, con lo que puedes entretener a las pequeñas si se aburren de bailar o pasear entre los puestos sin necesidad de salir del meollo.

Vamos, que fijo que repetimos en futuras ediciones del festival.









lunes, 23 de febrero de 2015

Sevilla

Hola!

En febrero, y con la excusa de que Nando quería correr el Maratón de Sevilla, nos fuimos los 3 y 1/2 a pasar unos días en dicha ciudad.

Llegamos un viernes por la tarde, fuimos directos a recoger el dorsal de la carrera y de allí a buscar el apartamento en el que nos íbamos a alojar: Un piso precioso en plena plaza de la Campana. Situación ideal para patear la ciudad.

El sábado por la mañana quedamos con Mayka, una prima de Nando y Miguel, su marido. Ambos hicieron de guías por la ciudad y nos enseñaron algunos de los rincones más bonitos y los mejores bares donde tomar algo. Alma se tomo su primer bocadillo de Pringá y... ¡cómo lo devoró!









El domingo, después de acostarnos tarde el sábado y cansado de la caminata madrugué para ir a correr. La carera genial, pero el mejor momento fue el paso por el ayuntamiento, en que me encontré con Betty y Alma que estaban animándome como locas.


Después de la carrera, comida y paseo por el barrio de la Alameda de Hércules y el Guadalquivir.


Nos quedó mucho por ver, y muchas ganas de conocer más de esta ciudad, asi que... ¡Pronto volveremos!